Luego de años de abandono, donde hasta la inmensa reserva de espacio verde ubicada a lo largo de la avenida Caseros, se había convertido en un territorio intrusado que avanzaba día a día en desmedro de la vida cotidiana de todos y de cada uno de sus vecinos. Una pesadilla que felizmente concluyó de la mano de la puesta en valor, el diseño, y la inversión.
Actualmente son trescientas siete las empresas que eligieron a Patricios para instalarse. Alrededor de doce mil personas se mueven por la zona, entre empleados, profesionales, estudiantes, vecinos.
Las transformaciones comenzaron a partir de la inauguración del Distrito Tecnológico y con la mudanza de la sede del Gobierno Porteño al moderno edificio creado por el arquitecto británico Norman Foster. Sin dejar de mencionar la llegada de un medio transporte fundamental en la vida de muchos porteños: el Subte!
Vale la pena resaltar que el DT propone beneficios a todos aquellos emprendimientos que quieran radicarse. Como por ejemplo, el acceso a créditos del Banco Ciudad de Buenos Aires, excepciones tributarias, beneficios que alcanzan a los trabajadores en relación de dependencia de esas empresas.
Porque el sur existe y también se destaca por sus casas de altos estudios, como el Instituto Tecnológico de Bs.As que ya convoca a más de seiscientos alumnos. En breve, vienen llegando las nuevas sedes de Caece, y la Universidad del Salvador.
Otros dos proyectos que se encuentran en marcha, tienen que ver con el traslado del Ministerio de Economia y Finanzas al predio donde funcionaba la cárcel de Caseros y la creación de un polo hospitalario.
Un barrio con personalidad, historia, que se renueva para seguir avanzando, y sin perder sus tradiciones.