Tres edificios fueron declarados monumentos en la Ciudad de Buenos Aires, por su valor arquitectónico aunque no sean estéticamente obras artísticas. Se trata de los edificios de la Biblioteca Nacional, Somisa y ENTel, que pertenecen a la corriente Brutalismo, de la segunda mitad del siglo XX.
La Biblioteca Nacional Mariano Moreno está ubicada en Agüero 2502, y uno de sus atractivos es que tiene la forma de una nave espacial, otro de los edificios es la torre Somisa que se encuentra en Av. Pres. Julio A. Roca 782 donde funciona a la fecha la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación. Y por último está el Edificio República (ENTel) que está ubicado en la intersección de la Av. Corrientes y Maipú, este último fue el primer edificio brutalista de la Ciudad.
Se entiende por brutalismo al conjunto de estilos arquitectónicos desarrollados en el siglo XX a nivel mundial.
Este estilo se revaloriza en la ciudad por el Poder Ejecutivo que ha decidido aprobar el proyecto que propone incluir esas obras dentro de un listado conformado por 600 edificios de diversas épocas y estilos, desde la Colonia hasta principios del siglo XX y que deben ser preservados.
Esa iniciativa es de la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos de la Ciudad, que hace uso de la Ley Nº 12.665, que se encarga de que las construcciones declaradas Monumento Histórico no pueden ser demolidas, ni modificadas.
La Biblioteca Nacional por ejemplo es un proyecto arquitectónico, de la década del 60, de Clorindo Testa, Francisco Bullrich y Alicia Cazzaniga; la construcción de este edificio tardó 30 años.
La Biblioteca tuvo su inauguración en 1992, en la inauguración se resaltó que su uso expresivo es del material y textura “hormigón armado”, lo que la hace un monumento arquitectónico digno de preservar y de presentar como patrimonio de la Nación.
Por otro lado la torre Somisa, está construida en acero, fue una empresa siderúrgica del Estado Argentino, creada durante la presidencia de Juan Domingo Perón, en el año 1947, pero al reconstruirla, fue terminada recién en 1977, a la fecha forma parte de la empresa multinacional Ternium, que es una empresa productora de aceros planos y largos, perteneciente al grupo ítalo-argentino Techin.