El Máximo símbolo porteño, el Obelisco, cumplió este domingo 23 de mayo, 85 años.
Fue creado por Alberto Prebisch, e inaugurado en 1936, luego de 60 días de trabajo en el que participaron 157 operarios, con motivo de celebrarse los 400 años de la primera fundación de Buenos Aires.
El Obelisco, que tiene una altura de 67.5 metros, se encuentra emplazado en la Plaza de la República, que queda en el cruce de las avenidas 9 de Julio y Corrientes, donde fue izada por primera vez la bandera nacional en la Ciudad.
Por eso, desde el Gobierno Porteño, para celebrar el 85º aniversario del Obelisco, se realizó una renovación de la fachada.
Los trabajos de renovación de la parte externa del Obelisco, comenzaron el 27 de marzo y finalizaron el pasado 12 de mayo. Para esto se utilizaron 310 litros de pintura y se restauraron las rejas que lo rodean a través de un tratamiento especial (decapado) para poner en valor el material original de las mismas (metal).
La ministra de Espacio Público e Higiene Urbana, Clara Muzzio, expresó que “Es importante recuperar el esplendor de uno de los grandes símbolos de la Ciudad, por eso realizamos tareas de mantenimiento y pintura en este gran ícono porteño y patrimonio de nuestro paisaje urbano”.
Asimismo, agregó que “Gracias a los trabajos que venimos haciendo en la Ciudad, tenemos una Avenida 9 de Julio que mejoró la movilidad con el Metrobus, con una iluminación LED que modernizó todo el alumbrado público y un BA Verde que se convirtió en punto obligatorio de vecinos, vecinas y turistas”.
El trabajo realizado sobre el Obelisco, sitio obligado de los turistas de todo el mundo, comprende dos partes: el realizado sobre la fachada y el que se hizo sobre la reja que lo protege.
En cuanto al trabajo que se llevó adelante sobre la fachada, contempló el hidrolavado de su estructura, retiro de vegetación y revoque mal adherido, pintura en toda la superficie externa y por último, se aplicó una laca a modo de protección en las letras bajo relieve.
En cuanto a los trabajos realizados en las rejas que protegen el Obelisco, ahí se puede destacar el un tratamiento (decapado) para remover el material actual y así llegar al metal puro de las rejas, y aplicaron dos manos de convertidor de óxido y dos de esmalte sintético para proteger la estructura de las rejas.