En el marco del Tango BA Festival y Mundial, la banda Otros Aires ofrece un concierto gratuito en la terraza del histórico Edificio Roverano, fusionando tango, electrónica y diseño en una experiencia multisensorial.
En el corazón de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el emblemático Tango BA Festival y Mundial 2024 se convierte en escenario de una propuesta innovadora y única. Hasta el 22 de agosto, la terraza del Edificio Roverano, ubicado en la histórica Avenida de Mayo 560, se transforma en un punto de encuentro donde el pasado y el presente se fusionan a través de la música. Allí, la banda Otros Aires, reconocida por su estilo de electrotango, celebra dos décadas de trayectoria con un espectáculo inmersivo que combina sonidos, luces y arquitectura.
Desde sus inicios, Otros Aires ha sido sinónimo de fusión. La agrupación, liderada por Miguel Di Genova, une géneros, épocas y disciplinas artísticas en una propuesta que trasciende lo musical. Según el propio Di Genova, “Otros Aires es un puente que une principios del Siglo XX con la actualidad”. Esta visión se materializa en cada una de sus presentaciones, donde el tango y la electrónica convergen para crear un nuevo sonido, un híbrido que no solo se escucha, sino que también se ve y se siente.
El escenario elegido para este espectáculo es la terraza del Edificio Roverano, un inmueble con más de un siglo de historia. Este espacio, con vistas privilegiadas a la Catedral, el Cabildo y la Plaza de Mayo, ofrece un marco perfecto para la propuesta de Otros Aires. Además, si las condiciones climáticas lo requieren, el show se trasladará al octavo piso del edificio, garantizando siempre la seguridad y comodidad del público.
En tanto, la entrada es gratuita, pero requiere reserva previa, disponible tres días antes de cada show a través de tangoba.org. Esta modalidad asegura que todos los interesados puedan acceder a una experiencia que trasciende lo tradicional. Como parte del Tango BA Festival y Mundial, “el más grande del planeta”, según lo describe Di Genova, el concierto de Otros Aires se inserta en una programación que incluye más de 500 actividades y la participación de 2 mil artistas de todo el mundo.
Jorge Macri, Jefe de Gobierno de la Ciudad, inauguró el evento destacando que “hoy celebramos la cultura porteña en su máxima expresión y la mostramos al mundo entero”. Así, el territorio porteño se convierte en un epicentro cultural donde se reúnen más de 750 parejas de bailarines y artistas provenientes de Brasil, Uruguay, Rusia, Japón y otros 50 países.
El espectáculo de Otros Aires no es solo un concierto, es una experiencia multisensorial. Además de la música, el grupo incorpora un mapping que envuelve al público en un relato visual que complementa la narrativa sonora. “Quiero contar una historia con las luces”, expresa Di Genova, quien además de músico, es arquitecto y diseñador. Esta combinación de disciplinas se refleja en cada detalle del show, donde la interacción entre la música y la arquitectura es fundamental. “Hago la música igual que un diseño”, afirma Di Genova, dejando en claro que para él, ambas formas de expresión son inseparables.
Por su parte, el líder de Otros Aires describe su rol en el escenario como una dualidad constante. “Soy dos personalidades. En cada presentación, estoy en dos lugares: en el escenario y entre los espectadores”, confiesa. Esta particularidad le permite mantener un diálogo constante con el público, ajustando su performance en tiempo real para ofrecer la mejor experiencia posible. En este sentido, cada concierto se convierte en una obra única e irrepetible, donde el espectador es tan protagonista como los músicos.
El repertorio que Otros Aires presenta en el Tango BA Festival y Mundial incluye un adelanto de lo que será su próximo disco, inspirado en figuras emblemáticas de la cultura argentina como Jorge Luis Borges y Oliverio Girondo. De tal modo, la banda sigue su tradición de fusionar lo local con lo global, llevando el electrotango a más de 200 ciudades de todo el mundo en sus 20 años de historia.
“Cada concierto de Otros Aires es una exposición y una explosión cosmopolita”, señala Di Genova, quien considera que su propuesta artística no solo une música y diseño, sino también cine, teatro y literatura. A su vez, el músico admite que quien se sube al escenario es un personaje construido desde su adolescencia, uno que deja de lado su vida personal para entregarse completamente a la performance. “No puedo dejar de hacerlo. Me fascina todo lo que hago. Soy tomado por rehén”, concluye, reflejando su total compromiso con la propuesta artística.
