Sergio Sabella, piloto con 40 años de experiencia, nos adentra en el fascinante mundo de los helicópteros de la Policía de la Ciudad, realizando operativos, rescates y momentos únicos en el cielo porteño.
Desde hace 40 años, Sergio Sabella ha surcado los cielos, desempeñando un papel crucial en la seguridad de los porteños como subcomisario del Departamento de Aviación de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. En una labor discreta pero esencial, colabora en la detención de delincuentes, brinda cobertura en eventos masivos y participa en misiones de búsqueda y rescate de personas. “Lo distinto de esta tarea es que parece ser invisible, pero constantemente estamos trabajando desde el aire cuidando a los vecinos”, comenta Sabella.
Con una pasión que surgió desde su infancia al ver películas de aviones, Sabella es uno de los 12 pilotos encargados de garantizar la seguridad de la ciudad las 24 horas, los 365 días del año. Desde la creación del Departamento de Aviación en 2016, han llevado a cabo 1.992 operativos, incluyendo más de 60 misiones solo en lo que va del año 2024.
Uno de los momentos más memorables en la carrera de Sabella fue el rescate de un adolescente extraviado en la Reserva Ecológica Costanera Sur en 2023. Junto con el principal Hernán Gelabert, desplegaron un operativo que culminó con el hallazgo del joven sano y salvo, una experiencia que Sabella describe como satisfactoria y tranquilizadora.
Además de participar en eventos internacionales como los Juegos Olímpicos de la Juventud y la Cumbre del G20 en 2018, Sabella y su equipo tuvieron la tarea única de trasladar a Lionel Messi y a la selección argentina campeona del mundo en 2022 al predio de la Asociación de Fútbol Argentino en Ezeiza. Este evento sin precedentes requirió una meticulosa logística para garantizar la seguridad de los jugadores y del público.
El Departamento de Aviación también colabora en la extinción de incendios y en operativos de las Fuerzas Especiales de la Policía, como el Grupo Especial de Rescate y la División de Operaciones Especiales Metropolitanas. Con tres helicópteros equipados con tecnología de vanguardia, el departamento asegura una respuesta rápida y efectiva ante cualquier emergencia.
Pero más allá de la complejidad de sus operativos, Sabella destaca los momentos únicos que ofrece su trabajo, como contemplar el paisaje de Buenos Aires desde el aire. “Lo particular de esta función de pilotar sobre la Ciudad es que uno tiene de base una vista única de distintos puntos de todo el territorio porteño”, señala.
Además de los helicópteros, el Departamento de Aviación también está incursionando en el uso de drones para obtener imágenes en tiempo real en áreas específicas. Con un Centro de Instrucción de Aeronáutica Civil, la Policía de la Ciudad forma a nuevos pilotos de drones, ampliando así su capacidad de vigilancia y seguridad en la ciudad.
Con una trayectoria de 42 años en el aire, Sabella aún conserva la misma pasión por volar que tuvo cuando era niño. “La pasión, a veces, no se puede explicar con palabras, se siente dentro del cuerpo y se vive cada día pensando en ese momento de salir a volar”, confiesa.
En resumen, el trabajo de los pilotos de helicópteros en la Policía de la Ciudad de Buenos Aires es fundamental para garantizar la seguridad de los ciudadanos, ofreciendo una respuesta rápida y efectiva ante diversas situaciones de emergencia. Con su dedicación y profesionalismo, estos pilotos continúan protegiendo a la comunidad desde lo más alto del cielo porteño.
