En una audiencia pública virtual realizada hoy, vecinos, estudiantes y organizaciones manifestaron su oposición a la instalación de comercios en la Reserva Ecológica Ciudad Universitaria – Costanera Norte de Buenos Aires. La construcción, actualmente frenada por un amparo judicial, generó críticas por el estudio de impacto ambiental realizado después del inicio de las obras.
La audiencia, transmitida en el canal de YouTube del gobierno porteño, reunió a diversos actores preocupados por la situación de la Reserva Costanera Norte. El proyecto “Reserva Ecológica Costanera Norte”, impulsado por la Dirección General de Áreas de Conservación, está detenido debido a un amparo presentado por el Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (Cecen) de la UBA.
Oscar Alberto Medina de la Dirección General Áreas de Conservación destacó la finalidad de acercar la naturaleza a los habitantes, subrayando el éxito de la reserva que ha atraído a 51 mil visitantes hasta julio de este año, con la perspectiva de superar los 100 mil en 2023.
José Stoiser, responsable del estudio de impacto ambiental, argumentó que las afectaciones causadas por las obras fueron temporales, enfocándose en la reducción de superficie absorbente y drenajes superficiales. Stoiser aseguró que no se extrajeron árboles y anticipó un aumento de biodiversidad con la plantación de 3.500 árboles nativos.
La Secretaría de Ambiente porteña propone mejoras, como señalética y una bicisenda, pero la incorporación de locales gastronómicos en áreas protegidas generó fuertes críticas. Adriel Magnetti, biólogo, señaló que las obras comenzaron sin consulta, pasando por alto normativas y ubicándose en zonas intangibles.
Nicolas Faggiani, un vecino, demandó una dirección propia para la reserva y personal capacitado. Estudiantes como Joaquín Braude López expresaron el rechazo de toda la comunidad educativa a las obras, insistiendo en la necesidad de evaluar previamente los impactos ambientales.
Hernán Invernizzi, titular del Área de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Defensoría del Pueblo, cuestionó la legalidad y legitimidad del proyecto, mientras Francisco Pardo Lampreabe, abogado y profesor de derecho ambiental, denunció la aberración jurídica al realizar la evaluación de impacto ambiental después del inicio de las obras.
En medio de la audiencia, quedó claro que la comunidad, respaldada por argumentos ambientales y legales, rechaza contundentemente la instalación de comercios en la Reserva Costanera Norte. La polémica se centra en la falta de consulta, la ubicación de construcciones en áreas intangibles y la discrepancia entre las autoridades y la comunidad respecto a la visión y gestión de este espacio protegido.