Como parte de un programa que contempla la plantación de 20 000 árboles, el lunes pasado se ofició la ceremonia de plantación de los primeros 50 árboles nativos en la Plaza de las Naciones Unidas. En la ceremonia participaron el Jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta y la ministra de Educación María Soledad Acuña, quienes junto al músico Charly Alberti, presidente de la Fundación R21 y alumnos que integran el programa de Escuelas Verdes, plantaron los primeros arboles del programa.
Según palabras dichas por el Jefe de Gobierno durante la ceremonia de inicio del programa, se está trabajando para cuidar el medio ambiente en la Ciudad, reforestando en zonas donde se más necesita y construyendo más espacios verdes, con la meta de alcanzar para este año las 110 hectáreas nuevas.
Por su parte, el director de Fundación R21 y ex baterista de Soda Stereo Charly Alberti, reflexiono sobre la importancia de la reforestación, que manifiesta un deber importante de los seres humanos, reponer a la tierra lo que tomamos. Estas iniciativas también buscan generar conciencia en los ciudadanos de la importancia de la reutilización de recursos, la concientización del cuidado del medio ambiente, la separación de residuos y el uso responsable del agua.
Los alumnos presentes en el acto pertenecen al Programa Escuelas Verdes, un programa creado por el Ministerio de Educacion e Innovacion del Gobierno de la Ciudad Autonoma de Buenos Aires. El mismo fomenta el desarroll sustentable a través de la educacion sobre el cuidado del medio ambiente.
Desde el año 2010 trabaja junto a escuelas estatales y privadas, diseñando actividades especificas para cada grupo de participantes. De esta manera está orientada a toda la comunidad educativa, desde alumnos, docentes, directivos y personal educativo en general.
El objetivo final del programa es que cada actor participativo pueda llevar sus conocimientos aprendidos a sus hogares y convertirse en agentes de cambio, generando no solo un cambio medioambiental, sino también cultural.
Estas iniciativas no solo generan una conciencia ambiental más amplia y una importante ayuda al equilibrio de la biodiversidad del planeta, sino que también plantea debates positivos sobre el trabajo en conjunto de organizaciones sin fines de lucro, el Estado y la Educación.
